Ya me hago daño, me quemo con el fogón,
Tanto cocinar, tanta ilusión, y luego, luego…
Luego se come y se pierde, así es esto de dos.
"Déjeme decirle, a riesgo de parecer ridículo, que el revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor. Es imposible pensar en un revolucionario auténtico sin esa cualidad"
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